De las mochilas a los guantes de látex, una empresa aprovecha oportunidades
- De las mochilas a los guantes de látex, una empresa aprovecha oportunidades

Las Tunas.–La unidad empresarial de base (UEB) Thaba Las Tunas 210, como tantas otras entidades en el país, ha debido reinventarse, sobre todo en relación con los modos de hacer, para atemperar su actuación a lo que son hoy políticas de país, en pos del fortalecimiento y el desarrollo de la empresa estatal socialista.
Tres talleres de talabartería y una fábrica de artículos de látex (única de su tipo en el país) componen esta, una de las dos ueb de la Empresa Thaba en Las Tunas. En cada uno de esos espacios se cuenta con personal calificado, de experiencia, preparado técnicamente y con el equipamiento tecnológico necesario para desarrollar las distintas producciones.
Así lo aseveró George Cruz Ramayo, director de la UEB, quien dijo, además, que en el presente año ha sido fuerte la producción de mochilas, sin dejar a un lado maletines, billeteras y merenderos, por solo citar algunos ejemplos.
Vale destacar que recibieron el premio a la calidad en la segunda feria de la Industria y el Comercio del territorio, con el producto M-21/22 (mochila), lo que habla también de la cultura del detalle con la que trabajan.
Sin embargo, el propio directivo apunta que, de no haber transformado los modos de hacer, nada de lo que exhiben hoy fuera posible.
«El 2020 marcó un giro importante, no solo para la ueb, sino para la empresa a nivel nacional. Ese año comenzamos a encadenarnos productivamente, primero con los órganos de la Fuerzas Armadas Revolucionarias y del Ministerio del Interior. Nos encadenamos también con muy buenos resultados para ambas partes, con el poligráfico del territorio, que nos produjo todas las etiquetas bicapa para nuestras producciones».
La aplicación de las resoluciones de pago 53 y 87 ha permitido también mejorías notables en el salario de los trabajadores. A eso se suma el pago de utilidades en cada trimestre, y se inició la aplicación de las competencias laborales. Todo ello constituye, sin duda, un incentivo notable para quienes llevan sobre sus hombros el peso productivo.
Precisamente, esa estabilidad productiva, que a su vez contribuye a la estabilidad económico-financiera, ha hecho posible, de acuerdo con el propio director de la UEB, que sea esta una de las tres seleccionadas en el país para convertirse en autorizada.
«Cuando eso suceda, estaremos hablando de un incremento de nuestras facultades y una mayor autonomía, lo que será muy beneficioso desde diversos puntos de vista».
Al cierre de septiembre, la UEB Thaba Las Tunas 210 cumplía todos los planes previstos, con unos 24,7 millones de pesos producidos, lo que indica un sobrecumplimiento del plan. Teniendo en cuenta tal realidad, esperan que octubre sea un mes igual de bueno, y que cumplir con lo pactado para el año no represente problema alguno, aunque Cruz Ramayo reconoce que no hay conformismo, porque aún no se satisfacen las demandas del pueblo.
FÁBRICA DE LÁTEX, LA ALTA RESPONSABILIDAD DE PRODUCIR
Al decir de su propio director, lo que sale de la única fábrica de artículos de látex existente en el país se considera una insignia para la entidad.
Conocida popularmente como «fábrica de guantes», por ser ese su producto líder, trabaja contra demanda para los ministerios de Salud Pública y del Turismo esencialmente, mediante la entrega de guantes domésticos y multiusos, que si bien no suplen todas las necesidades, sí impactan de forma positiva en la sustitución de importaciones.
Al respecto, George Cruz Ramayo explicó que, dadas las tensiones económicas por las que atraviesa el país, los financiamientos han sido pequeños, y que en ocasiones no son oportunos. La propia empresa también autofinancia parte de ese recurso, con el fin de incrementar el capital disponible y, por ende, la disponibilidad de materia prima.
El directivo señaló también que se amplió el alcance del sistema de gestión de la calidad, precisamente con el fin de que la planta pueda abarcar otros renglones productivos que necesitan mayores requisitos.
Pero producir allí no es sencillo. Se enfrentan dificultades objetivas muy puntuales que conspiran contra la voluntad colectiva. No existe, por ejemplo, manera de conservar la materia prima si no se utiliza en el momento adecuado; y la línea, aunque con un alto componente automatizado, ya tiene años de explotación, y se dificulta la adquisición de partes y piezas.
Antonio Elio Nuñez Nojas, jefe de la fábrica, puntualizó que más del 80 % de la materia prima es importada y, por lo tanto, hay que proteger ese recurso y atemperarse a él. «Sucede que en ocasiones la materia prima no tiene las características de otras con las que hemos trabajado, y entonces tenemos que acudir a la capacidad y la inteligencia de nuestra gente para poder procesarla y cumplir con los estándares de calidad necesarios».
Esta fábrica, en el periodo de la COVID-19, produjo un alto nivel de guantes multiusos para los sectores que se mantuvieron activos, y se logró incluso un récord productivo. Sin embargo, no se llega a cubrir la capacidad instalada, como apunta Nuñez Nojas.
«Si nuestra planta llegara a trabajar a máxima capacidad, con todos los aseguramientos que eso implica, seríamos capaces de producir unos tres millones de guantes anualmente, y tal vez hasta un poco más. Pero, objetivamente, hoy no podemos».
Sin embargo, aunque los guantes son su producto líder, han incursionado en otros, pese a que no siempre pueden sostenerse en el tiempo. A este particular también se refirió el Jefe de planta.
«A partir de una solicitud de Apicuba, comenzamos a producir membranas especializadas para extraer el veneno de las abejas sin que estas mueran. Estamos hablando de una textura que permite al insecto clavar su aguijón y poder sacarlo. Asumimos el reto y logramos hacerlas.
«También hicimos en un momento determinado vaginas artificiales con su cono para inseminación en la ganadería, pero por falta de moldes no hemos podido volver a producirlas.
«Carecemos de muchos productos. El país nos sirve lo que se puede. El equipo técnico, sobre todo el tecnólogo, trabaja muy fuerte y de manera acertada con las formulaciones, porque el látex siempre es el mismo, pero necesita de otros 12 productos para hacer los guantes, que no siempre están o no son los ideales.
«El bloqueo a nosotros nos afecta. A veces por esa causa no se puede comprar lo que se demanda. Nos pasa con las piezas de repuesto, por ejemplo. Nos hemos visto en la necesidad de hacer innovaciones importantes, porque hay determinados componentes que no se pueden adquirir por estas mismas limitaciones. Por ejemplo, sin los variadores de frecuencia esa fábrica no puede producir, pero el año pasado tratamos de adquirirlos, y la firma que los produce nos negó la compra».
UN MERCADO CAMBIARIO DE LA MANO DE LA BANCARIZACIÓN
Llevar a la venta minorista producciones nacionales a una tasa de cambio de uno por 120 ha dado buenos resultados para las empresas que lo aplican. El denominado mercado cambiario permite ingresos que luego se pueden reinvertir en beneficio de las propias entidades.
La empresa productora y comercializadora de artículos de talabartería Thaba también se ha insertado en esta iniciativa, y la segunda tienda de la entidad en el país abrió sus puertas en la UEB Las Tunas 210.
Desde el pasado mes de agosto, se comercializan allí, a precios inferiores a los de productos similares vendidos por formas de gestión no estatal, una serie de artículos producidos no solo en Las Tunas, sino en otras entidades del país, con muy buena aceptación popular. Tal es así que, hasta la fecha, se cumplen los planes de ventas minoristas.
Yoannis García Alonso, administradora de la tienda, dijo a este medio que llegan hasta allí personas de todos los municipios y de otras provincias. «Entre los productos más demandados ahora están las mochilas, las carteras, y los guantes, tanto los domésticos como los multiusos, en 70 y 50 pesos, respectivamente».
A tono con la política de bancarización de la sociedad, en esta tienda los pagos se realizan por canales de pago electrónico, con buena aceptación también, como asegura Jennifer Cristina Fuentes Domínguez, dependienta y encargada de hacer los cobros que, en este caso, pueden ser tanto por Transfermóvil como por Enzona, y ofrecen a las personas beneficios de descuento.