Vidrios Mariel es otro reto para Metunas
- Vidrios Mariel es otro reto para Metunas

Las Tunas.–Más allá de recursos, tecnología o materias primas, es el capital humano lo que hace grande a una industria. Asumir los retos de conjunto, sobreponerse a las dificultades, y apostar por la calidad y la eficiencia son pilares sin los cuales no hay éxito posible.
Así se piensa en Metunas, la Empresa de Estructuras Metálicas del balcón del oriente cubano, una entidad de cuyos resultados dan muestra las incontables obras a las que ha contribuido a lo largo y ancho del país.
Actualmente, esta industria, que lleva con orgullo el nombre del comandante Paco Cabrera, asume la fabricación de una obra vital para el país, la planta de envases de vidrio ubicada en la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZED), cuyo impacto será notable para satisfacer las demandas nacionales de este tipo de envases.
A la peculiaridad y retos que plantea esta obra, se acercó Granma, desde el diálogo con algunos de sus protagonistas.
FÁBRICA DE VIDRIOS, OTRO APORTE DE METUNAS A MARIEL
En septiembre de 2018 se aprobó la empresa mixta Vidrios Mariel S.A., como usuario de la ZED. En ese entonces se dio a conocer que esta pretendía la instalación allí de una moderna planta para la fabricación de envases, que cubriría el 70 % de las demandas de las industrias de bebidas y conservas.
En su posterior concepción, el proyecto incluyó la combinación de hormigón y estructuras metálicas. Estas últimas, de no ser producidas en Cuba, debían ser importadas, y eso implicaría un costo mucho mayor para el país. Ante esa realidad, Metunas, con amplia participación en algunos de los más importantes objetos de obra de la Zona Especial de Desarrollo, apostó por asumir el reto, como explica Heiki Morales Pérez, directora adjunta de la entidad.
«Cuando supimos que se haría una planta para la fabricación de envases de vidrio en la ZED Mariel, con un diseño que combina hormigón y estructuras metálicas, y como industria insigne en la fabricación de estructuras a nivel de país que somos, rápidamente nos pusimos en función de insertarnos en el negocio. Allí se conoce nuestro trabajo y, por lo tanto, a partir de marzo de 2021 asumimos el proyecto de conjunto con la Empresa de Proyectos de Arquitectura e Ingeniería del Mariel.
«Estamos hablando de 1 600 toneladas de estructuras metálicas, es una obra bastante grande. En una primera etapa se fabricaron las estructuras del almacén de productos terminados y la nave de producción “zona fría”, con algunos objetos de obra pequeños. Ahora, en la segunda etapa, estamos trabajando en el proyecto y la fabricación de la nave de producción “zona caliente”, y de otros objetos de obra que se han ido definiendo de forma paulatina», apuntó.
La ingeniera señaló, además, que es esta la mayor obra que ha asumido la industria tunera en los últimos años, y que representa el 53 % del plan de 3 000 toneladas, trazado para el presente calendario.
«Estamos hablando de naves de 48 metros de luz (significa que existe una distancia de 48 metros entre una columna y otra) y, además, una combinación con hormigón, excepto en las naves de producción. Hemos insertado a la obra varios proyectistas, de manera que podamos abarcar a la vez un mayor número de objetos de obra. La fabricación la hemos ordenado por secuencia de montaje, y hasta este minuto estamos cumpliendo el cronograma de entrega», añadió.
Los trabajos correspondientes a Vidrios Mariel deben concluir al cierre de 2023, pero eso implica, lógicamente, un compromiso de quienes ejecutan cada una de sus partes. Así lo aseveró Edilio Áreas Pérez, técnico de Pailería del Taller de Ensamble y Soldadura.
«Ahora mismo vamos a hacer unas 600 toneladas de la parte de la zona caliente, de los hornos. Hemos trabajado horas extras, fines de semana, para que la industria pueda cumplir con los plazos previstos. Somos muy estrictos con la calidad, muy cuidadosos, incluso hacemos preensambles aquí, para comprobar que todo esté de acuerdo con los planos y a las exigencias de la obra».
Humberto Maceo Suárez, pailero con 37 años de experiencia en Metunas, corrobora las palabras de su compañero: «Estamos trabajando con mucho detalle, con mucho esmero. Tenemos experiencia, sabemos trabajar muy bien con los planos, y somos muy cuidadosos para que todo salga con la calidad requerida. Somos un equipo y sabemos hacer de todo», afirmó.
OLFATO, VISIÓN Y PROYECCIÓN SOCIAL
Para una industria de este tipo es esencial el estudio constante del mercado, para insertarse de forma pertinente en negocios y proyectos que garanticen su estabilidad. En el caso de Metunas, esa es una constante, como aseguró a este medio Aliuska Osoria Tejas, directora de Negocios y Marketing.
«Analizamos el mercado para definir nuestras proyecciones y presentar una oferta siempre a la altura de lo que exige el cliente. Por varios años hemos estado en la ZED Mariel, donde nos hemos logrado mantener porque buscamos nuevos negocios, y por la calidad de lo que hacemos».
Sin embargo, son disímiles los sectores de impacto para la economía y la sociedad cubana en los que se ha insertado la empresa; así lo corroboraron las palabras de Osoria Tejas.
«Metunas ha fabricado diversas estructuras para el turismo. También contribuimos con el sector eléctrico, fabricamos torres de alta tensión para la propia ZED, para el cayo Ramón de Antilla, y estamos a la espera de la materia prima necesaria para construir aquí la estructura metálica dañada por el incendio en la termoeléctrica de Felton; aunque es válido aclarar que, aun sin tener la materia prima, se ha trabajado ya en los proyectos de ese objeto de obra.
«Otra rama estratégica a la que hemos aportado es el sector tabacalero, con naves de cura y secado para varias provincias del país. Más recientemente hicimos aquí varias compuertas para la presa Levisa, como parte de las obras del Trasvase Este-Oeste, y en el caso del sector azucarero, ahora estamos concluyendo la chimenea y el domo para el central Panchito Gómez Toro», argumentó.
También ha sido notable la contribución de esta industria al desarrollo local, su inserción en tareas priorizadas para el territorio, así como el apoyo a programas sociales y otros con gran impacto para la población. A este particular también se refirió la Directora de Negocios y Marketing.
«El ejemplo más sensible es el hospital Ernesto Guevara, el mayor del territorio. En el periodo de la COVID-19 hicimos camas, mobiliario, portasueros; les vamos a hacer un servicio sand blasting (pintura en cámara especializada) de forma gratuita, y les fabricamos algunas naves para áreas exteriores. Siempre en estos servicios tenemos en cuenta los precios, porque son sectores presupuestados pero, además, tienen aportes considerables al bienestar del pueblo.
«Estamos inmersos también en un proyecto con Trabajo y Seguridad Social, fabricando camas para los asistenciados, de las cuales hemos entregado ya 300, a razón de cien mensuales, de un contrato de mil. Nos hemos insertado también con Comunales en la reparación de puentes para el acceso a barrios y comunidades. Hemos hecho tanques para Acueducto, con su base incluida, para lugares con problemas en el abasto, entre otras obras. Lo cierto es que con Metunas siempre han podido y podrán contar nuestra provincia y el país».
No todo es color de rosa. Esta industria enfrenta limitantes puntuales que tienen su origen en las complejidades de la situación que vive el país, y en el propio impacto del bloqueo. No obstante, la prioridad es siempre hacer. La forma la encuentra un colectivo versátil y comprometido, que cada día va a la búsqueda de esos retos que traen consigo nuevas oportunidades.