Reafirman Cuba y el Vaticano relevancia de relaciones históricas
El estado actual de las relaciones bilaterales entre la mayor de las Antillas y la Santa Sede y la voluntad de contribuir a su fortalecimiento, en ocasión del aniversario 90 del establecimiento de vínculos ininterrumpidos, fueron refrendadas hoy, en el Salón de Protocolo Cubanacán (El Laguito), en esta capital.
En conversaciones sostenidas por Bruno Rodríguez Parrilla, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y ministro de Relaciones Exteriores, y Monseñor Paul Richard Gallagher, secretario para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales de la Santa Sede, quien se encuentra en la isla en visita oficial hasta el próximo 6 de junio, ambos destacaron el principio del respeto mutuo y la disposición al diálogo que han marcado los lazos en su devenir histórico
Rodríguez Parrilla extendió al visitante una cordial bienvenida a la nación antillana y le expresó la importancia que concede Cuba a fomentar los acercamientos en temas de especial interés para ambas partes.
Previo a las conversaciones, y tras el recibimiento y el saludo protocolar, se realizó una ceremonia de cancelación postal, con motivo del aniversario 90 del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre la República de Cuba y la Santa Sede, hito ocurrido el 7 de junio de 1935.
Elio Eduardo Rodríguez Perdomo, viceministro de Relaciones Exteriores, señaló que en las nueve décadas transcurridas, y particularmente desde el triunfo de la Revolución el 1 de enero de 1959, el diálogo constructivo y de respeto ha sido la base para fortalecer los nexos bilaterales, superar desafíos y encontrar un camino para construir puentes de entendimiento.
Precisó que de igual manera se conmemora el décimo aniversario de la visita al Vaticano del General de Ejército Raúl Castro Ruz, en mayo del 2015, y del viaje apostólico del Papa Francisco a Cuba, en septiembre del propio año, así como el honor de haber recibido previamente en el territorio nacional a los pontífices Juan Pablo II y Benedicto XVI.
Los intercambios de alto nivel entre Cuba y la Santa Sede han reflejado la evolución ascendente de tales vínculos en estos noventa años de nexos bilaterales, que han quedado grabados en la memoria de la nación cubana, y agradecemos los mensajes de paz y unión familiar para el pueblo cubano, así como de rechazo a la política de bloqueo económico, comercial y financiero que Cuba enfrenta por más de seis décadas, agregó.
De esta manera, concluyó expresando el pesar del Estado y el pueblo cubanos por la partida física del Papa Francisco en este 2025, el deseo de que su legado siga inspirando a generaciones presentes y futuras y la confianza en que la fecha celebrada será cimiento para continuar reforzando los vínculos bilaterales, voluntad renovada en el inicio del pontificado de León XIV.
Entre los presentes se encontraban además Caridad Diego Bello, jefa de la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, y Antoine Camilleri, Nuncio Apostólico, entre otras autoridades y representantes gubernamentales y eclesiásticas.