Joven Club y redes privadas se interconectan en Cuba: “Nos beneficiamos todos”

Pedro Ernesto Pérez, conocido como “Doom”, tiene una red privada de más de tres mil usuarios en La Habana. La comunidad digital que él gestiona, junto a otros administradores, dejó de ser una simple plaza para videojuegos y se convirtió en una plataforma que aloja múltiples servicios. Cuando el pasado 29 de julio entraron en vigor las resoluciones 98 y 99 del Ministerio de Comunicaciones (Mincom), parecía llegar el fin de su comunidad, donde los users del Cerro compartían más que pasiones. “Mi primera impresión fue traumática, muchos pensamos que sería el final de la red. Había muy poca información sobre las nuevas resoluciones y no se entendía bien lo de la potencia de los equipos, el tema del cableado o si nos íbamos a quedar sin los servicios que con tanto esfuerzo habíamos construido”, comentó a Cubadebate el joven administrador. “Doom” asegura que no analizó el texto en un primer momento. Con la “cabeza más fría”, comprendió que la norma permitía otros tipos de interconexiones que no atentaban contra el funcionamiento de la red. Las opciones existentes consistían en conectarse a través de ETECSA, como operador de telecomunicaciones, o acercarse a los Joven Club de Computación que también están en los barrios de los 168 municipios de Cuba. “Esta última fue la que adoptamos”. “A finales del mes de junio redactamos una propuesta y fuimos al Mincom, el documento fue recibido por sus funcionarios. Allí nos explicaron de las posibilidades reales que existían de conectarnos mediante los Joven Club y ya hoy realizamos las primeras pruebas piloto dentro del propio municipio”, aseguró Pedro Ernesto. En estos momentos, dijo el admin del Cerro, se están transfiriendo a los servidores de esos centros, los juegos más demandados por los miembros de su comunidad (Battlefield, World of Warcraft), servicios como Notigol (una plataforma dedicada a los fanáticos del fútbol), su red social y el directorio web. “Todos (los servicios) ya están funcionando en las pruebas y algunos se conectarán con los usuarios de Pinar del Río”. Luego de explicar cómo será el proceso a los users, estos lo ven con buenos ojos, afirma Doom. “Aunque existen aún algunas inconformidades en las redes de La Habana, los propios integrantes y administradores están donando sus equipos para establecer las nuevas interconexiones. Tal es el caso del Cerro, Diez de Octubre, La Lisa, Los Pinos en Arroyo Naranjo, entre otros”. Para aquellos que viven más distantes de los Joven Club —explica el administrador— también hemos visto otras alternativas junto al Ministerio de Comunicaciones. Se estudia la posibilidad de conectar redes de barrios a puntos wifi de Joven Club, ubicados en otras instituciones del Mincom. “Esto no pasará de la noche a la mañana, pero es posible lograrlo”. Víctor Julio Hernández Arana, otro usuario de una red privada de La Habana, dijo el pasado 12 agosto a través de Facebook que se encontraba reunido en el Cerro: “Ya prepararon las condiciones para la prueba piloto desde la Esquina de Tejas. Ya esta semana empezamos. Al parecer no todo es tan malo como decían (…) pronto se darían más detalles en otro post. Esta prueba se va a extender a todos los pilares”. El Palacio Central de la Computación anunciaba este jueves, en la misma red social, que “se realizan las pruebas de conexión y la incorporación de la infraestructura para sumar las redes de personas naturales a la red de Joven Club”.