Llegar al fondo de las cifras
Autor: Alina Perera Robbio.
Cuba sigue auscultando su situación epidemiológica ante la presencia de la COVID-19. Ningún esfuerzo, a pesar de que los expertos buscan el detalle, debe llevar a la conformidad, porque la epidemia cobra vidas. Es por eso que hasta para mirar las cifras hay que ser audaz y buscar todas las combinaciones posibles en el momento de hacer lecturas y tomar decisiones.
Sobre este concepto el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, compartió este martes su certeza de que la estadística no es algo frío, de tal manera que, ante ella, hay que sacar relaciones para todo tipo de estudios, porque ese es el camino, dijo el Jefe de Estado, que nos dará definiciones sobre dónde están los problemas.
Tal reflexión tuvo lugar durante la reunión del Grupo temporal de trabajo, jornada que también estuvo presidida por el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, y en la cual –a través de videoconferencia– se pasó revista, junto al comportamiento de la epidemia, a la disponibilidad del oxígeno medicinal en cada territorio, así como a la situación electroenergética.
El director nacional de Epidemiología del Minsap, doctor Francisco Durán García, explicó que se reportan más de 761 000 casos confirmados. En los últimos 15 días han sido diagnosticadas 114 315 personas como positivas, para una tasa de incidencia de transmisión de 1 021,9 por cada 100 000 habitantes. Las provincias que mantienen el indicador más elevado son Pinar del Río, Sancti Spíritus, Cienfuegos, Mayabeque, Atermisa y Las Tunas.
El país acumula, afirmó, 6 449 fallecidos por el coronavirus, lo cual representa una letalidad del 0,85 %, inferior en 1,21 % con respecto al mundo, y en 1,63 con respecto a la región de las Américas.
Sobre el proceso de vacunación, precisó que, hasta este 12 de septiembre, de la población total de Cuba, quienes han recibido una primera dosis representan el 62,9 %; los que han llegado a la segunda son el 46,3 %; y con una tercera, ya son un 38,5 %.
Aunque en algunos territorios la situación tiende al control de la epidemia, en otros las cifras de transmisión todavía son altas. El país no deja de estar tenso en una batalla que mueve múltiples fuerzas. Incluso llegando al fondo de las cifras, habrá un umbral que vale la pena atender todo el tiempo, y en el cual también se decide nuestra suerte: el de la responsabilidad de cada uno de nosotros. Artículo tomado del periódico Granma Digital.