Ganar tiempo en el tratamiento es clave para preservar la vida

Autor: Yaima Puig Meneses. Desde el Centro de Dirección del Gobierno, creado en días recientes con el propósito de asegurar el abastecimiento de oxígeno a las instituciones de Salud de todo el país, el miembro del Buró Político del Partido y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, encabezó en la mañana de este domingo la reunión del grupo temporal de trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus.

Tras evaluar puntualmente la situación epidemiológica del territorio nacional, el Primer Ministro insistió en la necesidad de agilizar la información a la población de los resultados de los PCR, un tema sobre el cual también ha reflexionado en varias ocasiones el Presidente de la República.

Cada persona a la que se le haga una prueba de PCR tiene todo el derecho a conocer los resultados, subrayó Marrero Cruz, y en muchos casos sucede, que como el resultado es negativo, no se le comunica.

De ahí su llamado a revisar la manera en que se lleva a cabo el proceso en los diferentes territorios, para lograr un sistema informativo que nos permita conocer constantemente cómo van los resultados y el mecanismo para transmitirlos a cada uno de los pacientes. “Que las personas conozcan el resultado de su prueba es clave”, enfatizó. Asociado a esta realidad, el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, explicó sobre las evaluaciones realizadas con los directores provinciales de Salud de los territorios y la importancia de cumplir con lo previsto en la actualización del protocolo para el diagnóstico y el manejo clínico de pacientes confirmados, sospechosos y contactos de quienes han resultado positivos a la enfermedad.

Una vez que tenemos la confirmación de un test de antígeno —puntualizó— ese paciente comienza a tratarse inmediatamente, acorde con el riesgo evaluado, como un caso positivo, para no perder tiempo en el tratamiento, que es lo más importante y nos permite salvar vidas.

Ante la actual complejidad epidemiológica, Portal Miranda recordó, además, que la cepa Delta acorta el tiempo de desarrollo de la sintomatología a partir de la exposición al virus, y cuando esperamos dos o tres días para comenzar el tratamiento, las personas tienen mayor riesgo de llegar a grave o a crítico, incluso de fallecer. En tal sentido, subrayó la prioridad con que se debe trabajar para sistematizar y agilizar toda la cadena que lleva hasta el resultado final del PCR. La calidad en la toma de muestras; su traslado en tiempo; el procesamiento al día; y que después, de manera inmediata, le llegue a la población el resultado, son la garantía para resolver una insatisfacción que hoy tiene el pueblo.

“El resultado del PCR hay que llevarlo hasta el paciente, tanto institucional como en la comunidad”, indicó. Y en ese proceder comentó acerca del trabajo que desarrollan los grupos comunitarios, que constituye una gran ayuda para trasladar desde los policlínicos hasta los consultorios los resultados y así, quienes están a la espera de la información en sus viviendas la reciban con mayor inmediatez.

A su vez, destacó la posibilidad que tienen las personas de conocer el resultado de su PCR a través del celular, una experiencia que se ha estado multiplicando y generalizando entre la población.

No obstante esa opción y otras que puedan existir, subrayó, “nada sustituye la responsabilidad que tiene el sistema de Salud de llevarle el resultado a cada una de las personas”.

Referido al trabajo directo en la comunidad, el Primer Ministro reiteró la necesidad de mantener al médico de la familia en su consultorio y no emplearlo innecesariamente en otras tareas asociadas al enfrentamiento de la epidemia. Recordó cómo, en otros momentos ocurrió que se sacaron los médicos de las comunidades y el trabajo en ellas resulta vital, pues la base principal del sistema de Salud cubano está en la atención primaria, en la atención a las personas de primera mano.

El hecho de que este domingo, más de 21 000 pacientes se encontraran ingresados en el hogar, llama la atención sobre la importancia de que no se afecte el trabajo en las áreas de Salud y los médicos y enfermeras puedan realizar allí las acciones que les corresponden, un elemento de vital trascendencia para dar a cada persona en su hogar el tratamiento que requiere.

De acuerdo con la información ofrecida por el Ministro de Salud Pública durante la reunión, en la última jornada fueron ingresadas en su domicilio 4 886 personas, que requieren de un seguimiento y atención sistemáticos. Las principales cifras se concentraban en las provincias de Cienfuegos, Pinar del Río, Mayabeque, La Habana, Granma y Artemisa.

Complejo y diverso sigue siendo el escenario epidemiológico que vive el país, no obstante, las acciones para enfrentarlo no se detienen. De ello dan fe, por ejemplo, el envío a Cienfuegos de nuevos especialistas del Instituto de Medicina Tropical “Pedro Kourí” para acompañar el procesamiento de muestras PCR y la ampliación de capacidades para atender a pacientes confirmados en la provincia de Santiago de Cuba.

La realidad que en estos momentos se vive en Matanzas, provincia que poco más de un mes atrás se convirtió en el epicentro de la epidemia en Cuba, demuestra que cuando se cumplen con rigurosidad los protocolos establecidos, es posible disminuir los niveles de contagio.

Este domingo allí se reportaron 218 nuevos casos positivos y según la información ofrecida por el gobernador Mario Sabines Lorenzo, en la semana que recién concluyó hubo una reducción del 30% de casos respecto a la anterior. “Llevamos seis semanas consecutivas disminuyendo”, aseveró.

En medio de esta colosal batalla por la vida, resulta esencial también el proceso de vacunación que lleva adelante el país. Al cierre del pasado 20 de agosto, ya se habían aplicado en Cuba 78 938 dosis y el 27,9% de la población tenía su esquema de vacunación completo.

Al respecto, el Titular de Salud Pública acentuó la importancia de avanzar tanto como sea posible en la vacunación y sobre todo en iniciar esquemas. Mientras más rápido comencemos a aplicar primeras dosis, más rápido podemos concluir la inmunización de las personas, allí donde se han dispuesto las vacunas, argumentó.

Como parte del análisis, donde participaron a través de videoconferencia las principales autoridades del Partido y el Gobierno de todas las provincias y del municipio especial Isla de la Juventud, se dio seguimiento, además, a la situación excepcional que se ha creado con las coberturas de oxígeno ante la rotura de la principal planta productora en Cuba.

“La producción de oxígeno sigue limitada”, ratificó el primer coronel Antonio Tamayo Aballe al evaluar detalladamente la situación de cada territorio. Por ello su énfasis en que las prioridades se continuarán estableciendo de acuerdo con el escenario particular de cada provincia.

Como parte del esfuerzo y las proezas que se han hecho en el país para hacer frente a esta realidad, se dio a conocer que en las próximas horas se comenzarán a emplear las producciones de una pequeña planta de oxígeno, en la provincia de Camagüey. Este sábado allí se llenaron 60 balones medicinales que, de acuerdo con la evaluación realizada por los especialistas de los ministerios de Industrias y de Salud Pública, tienen los parámetros adecuados para su uso. Son nuevas producciones que se incorporarán al balance nacional y, si bien no significan grandes cifras, contribuyen a aliviar en algunos lugares las tensiones.

Y ante las muchas tensiones y retos que vive hoy nuestro pueblo, el Primer Ministro concluyó el encuentro con una felicitación a las federadas cubanas, que este 23 de agosto conmemoran el 61 aniversario de la fundación de la Federación de Mujeres Cubanas.

Para las mujeres que se desempeñan en el sector de la Salud fue su principal reconocimiento. En esta batalla compleja de enfrentamiento a la COVID-19 y el trabajo encomiable que ha hecho el personal sanitario —destacó— ellas han desempeñado un papel esencial. Artículo tomado del periódico Granma Digital.